
Coaching para gestionar los cambios de la vida
Actualmente, y debido a la pandemia, estamos atravesando el mayor cambio y reto que la humanidad ha vivido. Estamos inmersos en un cambio en todos los ámbitos de la vida.
Actualmente, y debido a la pandemia, estamos atravesando el mayor cambio y reto que la humanidad ha vivido. Estamos inmersos en un cambio en todos los ámbitos de la vida.
En la piscina reflexiono sobre lo vivido esta primavera del 2020. Me parece increíble poder disfrutar del sol en mi piel y de tomar un baño. Apenas hay vecinos, todos han huido de Madrid.
La vida es pasar por crisis, la vida nos plantea situaciones que, a priori, superan nuestras capacidades: una enfermedad, una ruptura de pareja, la muerte de un ser querido o una pandemia como el COVID-19.
Las situaciones de crisis nos ayudan a ver claramente lo que tenemos dentro, tanto la luz como la sombra.
Estamos aprendiendo con una fuerza inigualable el poder del ahora, da igual lo que tengamos planificado, nuestras expectativas, las citas, los viajes, las programaciones previstas, …
Parece una contradicción, que en el momento social donde más conexión existe gracias a la tecnología, sea el momento de mayor aislamiento social. La sociedad tecnológica es una sociedad enferma que favorece desconexión interna y externa
Despedirnos es decir adiós. Saber despedirnos es una tarea complicada, muchas personas prefieren quedar enganchados en relaciones cómodas, tóxicas, seguras, infelices, infantiles.
Cada vez atiendo más casos de personas con éxito real en su ámbito profesional, académico o social…y, sin embargo, con sensación de que no son suficientes, que no valen, que no se lo merecen, que no están a la altura, que van a ser descubiertos por impostores…
Vivimos en una sociedad donde cada vez hay más personas que no quieren sufrir. En la sociedad actual se vende que “aparentemente” podemos controlar y gestionar nuestra vida y nuestras emociones.
En un mundo donde las distracciones son cada vez más frecuentes, es esencial encontrar momentos para nutrir nuestro cuerpo, mente y espíritu.